MARIA JOSEFA YZUEL YA CONOCE SU EDIFICIO

No hay trabajos de hombres ni de mujeres. No hay aficiones de mujeres ni de hombres. Hay trabajos y hay aficiones o, al menos, así debería ser…

#Huesca (#sociedad).- Aunque todavía hoy siga sorprendiendo, han sido muchas las mujeres que han dedicado su vida al mundo de la ciencias y el caso de María Josefa Yzuel es uno de esos casos. Nacida en Jaca (Huesca) en 1940, Yzuel se convirtió en la primera mujer con plaza titular en la universidad de Zaragoza, concretamente en el área de Ciencias Físicas, estudios superiores que realizó entre 1957 y 1962. Este martes, a sus 78 años, ha visitado el Parque tecnológico Walqa donde desde el pasado 15 de noviembre, uno de los edificios lleva su nombre. La decisión de los responsables de Walqa de poner el nombre de una mujer científica a un edificio fue una decisión valiente porque normalmente no se tienen en cuenta estos detalles. Es una de las razones por las que las mujeres nos hacemos un poco invisibles”, explicaba la científica.

Yzuel anima a muchas otras chicas a decantarse por la carrera de ciencias ya que considera que pese a lo que ha evolucionado la sociedad “siegue habiendo pocas mujeres científicas”. Respecto a su experiencia y pese a todo lo logrado – además de su doctorado y ser titular de la plaza en Ciencias Físicas también es catedrática de Optica; después de terminar su tesis realizó una estancia en el Reino Unido; cubrió una buena parte de su trayectoria profesional en el Departamento de Física de Facultad de Físicas de la Universidad Autónoma de Barcelona; fue presidenta de la SPIE (The International Society for Optical Engineerings); obtuvo el Premio Igualdad 2107 de la Universidad de Alicante por su compromiso por la igualdad de género y su trayectoria académica y es también Doctora Honoris Causa por la Universidad de Granada – reconoce que sintió discriminación. “En mi época no era consciente de lo que hacía pero en ocasiones sí que tuve la sensación de haber sufrido discriminaciones, de que me arrinconaban”.

Pese a que en su momento se sintiera arrinconada, en la actualidad Walqa le rinde el tributo que merece dando nombre a un edificio. Recordamos que se hizo una votación popular con más de 1000 votos entre tres científicas aragonesas y ella fue la elegida. Homenaje que le llena de emoción. “Este edificio lleva el nombre de mucha gente que me ha ayudado a lo largo de mi trayectoria. He sentido una gran emoción porque ha sido algo inesperado. Me emocionó porque me parece un reconocimiento enorme para el trabajo hecho cada día”.

Comentarios

Autor entrada: Patricia Arizon Bails